CIMZIA

Última actualización: 

2020

CIMZIA
Tratamiento de la enfermedad de Crohn y artritis reumatoide
UCB

Indicaciones Terapéuticas: 

Enfermedad de Crohn: CIMZIA está indicado para reducir los signos y síntomas de la enfermedad de Crohn y mantener la respuesta clínica en los pacientes adultos con enfermedad activa de moderada a severa y que han tenido una respuesta inadecuada a la terapia convencional.

Artritis reumatoide: CIMZIA está indicado para el tratamiento de adultos con artritis reumatoide activa de moderada a severa.

Forma Farmacéutica y Formulación: 

Solución

Fórmula. 

La jeringa prellenada contiene: 

Certolizumab pegol 200 mg

Vehículo c.b.p. 1 mL

Presentaciones: 

Caja de cartón con 2 jeringas prellenadas de vidrio con aguja con 200 mg/ml de Certolizumab Pegol (la jeringa con aguja está acoplada con un émbolo de bromobutilo y protector rígido para la aguja), con 2 almohadillas impregnadas con alcohol. Caja de cartón con 6 jeringas prellenadas de vidrio con aguja con 200 mg/ml de Certolizumab Pegol (3 paquetes con 2 jeringas, la jeringa con aguja está acoplada con un émbolo de bromobutilo y protector rígido para la aguja), con 6 almohadillas impregnadas con alcohol.

Contraindicaciones: 

Hipersensibilidad a la sustancia activa o a cualquiera de los excipientes (ver Precauciones Generales).

Tuberculosis activa u otras infecciones severas como sepsis, abscesos e infecciones oportunistas.

Reacciones secundarias y adversas: 

La mayoría de las reacciones adversas serias observadas en los estudios clínicos con CIMZIA en el tratamiento de la enfermedad de Crohn y la artritis reumatoide, fueron infecciones serias, neoplasias e insuficiencia cardiaca (ver Precauciones Generales).

En los estudios controlados antes de la comercialización, de todas las poblaciones combinadas de pacientes, las reacciones adversas más comunes (≥ 8%) fueron infecciones de las vías respiratorias superiores (18%), exantema (9%) e infecciones de vías urinarias (8%).

Enfermedad de Crohn: En los estudios controlados y no controlados de la enfermedad de Crohn, 1,564 pacientes recibieron CIMZIA en algún nivel de dosis, de los cuales 1,350 sujetos recibieron 400 mg de CIMZIA.

Durante los estudios clínicos controlados, la proporción de pacientes con eventos adversos serios fue 10.8% con CIMZIA y  8.6% con placebo.

Las reacciones adversas más comunes (ocurrieron en ≥ 5% de los pacientes tratados con CIMZIA y con mayor incidencia comparados con el placebo) en los estudios clínicos controlados con CIMZIA, fueron nasofaringitis (11.1% CIMZIA, 6.7% placebo), nausea (8.0% CIMZIA, 6.7% placebo), infección de vías urinarias (5.1% CIMZIA, 4.4% placebo), dolor abdominal (9.3% CIMZIA, 8.8% placebo), artralgias (6.7% CIMZIA, 3.9% placebo) y cefalea (14.8% CIMZIA, 13.8% placebo).

La proporción de pacientes que suspendieron el tratamiento debido a reacciones adversas en los estudios clínicos controlados, fue 11.3% con CIMZIA y 12.6% con placebo. En los estudios clínicos controlados, las reacciones adversas más comunes que llevaron a la suspensión del tratamiento con CIMZIA (en por lo menos 2 pacientes y con incidencia mayor que el placebo), fueron diarrea (0.5% CIMZIA, 0.2% placebo), dolor abdominal (0.9% CIMZIA, 0.4% placebo) y nausea (0.4% CIMZIA, 0.2% placebo).

Artritis reumatoide: Cimzia fue estudiado en 2367 pacientes con artritis reumatoide en estudios controlados y de  diseño abierto.

En los estudios controlados con placebo, los pacientes que recibieron CIMZIA tuvieron una duración de exposición aproximadamente 4 veces mayor en comparación con el grupo placebo. Esta diferencia en la exposición probablemente se debe a que los pacientes que recibieron placebo, se retiraron más tempranamente. Además, los estudios RA-I y RA-II tuvieron un retiro forzoso de los pacientes que no respondieron al tratamiento en la Semana 16, de los cuales la mayoría recibía placebo.

Durante los estudios clínicos controlados, la proporción de pacientes con eventos adversos serios fue de 10.7% con CIMZIA y de 6.6% con placebo.

Las reacciones adversas más comunes reportadas en los estudios clínicos controlados, pertenecen a Infecciones e Infestaciones de acuerdo a la clasificación de órganos y sistemas, reportadas en el 15.5% de los pacientes tratados con CIMZIA y en 7.6% de los pacientes tratados con placebo,  y a los Trastornos Generales y a las condiciones en el sitio de administración reportados en el 10% de los pacientes que recibieron CIMZIA y el 9.7% de los pacientes tratados con placebo.

La proporción de pacientes que suspendieron el tratamiento debido a reacciones adversas en los estudios clínicos controlados, fue del 5%; para los pacientes tratados con CIMZIA y del 2.5% para los pacientes tratados con placebo. Las reacciones adversas más comunes que llevaron a la suspensión de CIMZIA fueron tuberculosis (0.5%), pirexia, urticaria, neumonía y exantema (0.3%).

La Tabla 1 enlista las Reacciones Adversas reportadas en los estudios clínicos en la enfermedad de Crohn, que involucraron a 1,564 pacientes que recibieron CIMZIA y en los estudios en artritis reumatoide que involucraron a 2,367 pacientes que recibieron CIMZIA y en la experiencia post-comercialización.

Dentro de la clasificación de órganos y sistemas , las reacciones adversas al menos “posiblemente” relacionadas con el certolizumab pegol, se enlistan de acuerdo al orden de frecuencia (número de pacientes que se espera que padezcan la reacción), utilizando las siguientes categorías: (muy frecuentes ≥ 1/10; frecuentes ≥ 1/100 a < 1/10; poco frecuentes ≥ 1/1000 a < 1/10,000; raras ≥ 1/10,000 a < 1/1000; muy raras < 1/10,000), frecuencia no conocida (no puede estimarse a partir de los datos disponibles). Dentro de cada grupo de frecuencia, los efectos indeseables se presentan en orden decreciente de gravedad.

 

Tabla 1. Reacciones Adversas a partir de Estudios Clínicos y de experiencia post-comercialización

Clasificación por
Órganos y Sistemas

Frecuencia

Reacciones Adversas

Infecciones e infestaciones

Frecuente

Infecciones bacterianas
(incluyendo tuberculosis y
abscesos), infecciones
virales (incluyendo herpes,
virus del papiloma, influenza)

Poco Frecuente

Infecciones fúngicas
(incluye oportunistas),
sepsis (incluye fallo
multiorgánico)

Neoplasias benignas,
malignas y no especificadas
(incluyendo quistes y
pólipos)

Poco Frecuente

Tumores sólidos, tumores
gastrointestinales, tumores
benignos y quistes
(incluyendo papiloma
cutáneo)

Rara

Neoplasias del sistema
linfático y sangre,
melanoma, cáncer de piel no
melanoma, lesiones
precancerosas (incluyendo
leucoplaquia oral, nevus
melanocítico)

Trastornos de la sangre y del sistema linfático

Frecuente

Trastornos eosinofílicos,
leucopenia (incluyendo
linfopenia, neutropenia)

Poco Frecuente

Anemia, trombocitopenia,
leucocitosis, linfadenopatía,
trombocitosis)

Rara

Pancitopenia, esplenomegalia, eritrocitosis, morfología anormal de los
glóbulos blancos

Trastornos del sistema
inmunológico

Poco Frecuente

Vasculitis, lupus
eritematoso, hipersensibilidad al fármaco,
psoriasis y condiciones
relacionadas, reacciones
alérgicas, autoanticuerpos
positivos

Rara

Edema angioneurótico,
sarcoidosis, enfermedad del
suero, paniculitis
(incluyendo eritema nodoso)

Trastornos endocrinos

Rara

Trastornos tiroideos

Trastornos del metabolismo
y de la nutrición

Poco Frecuente

Desequilibrio electrolítico,
dislipidemia, trastornos del
apetito, cambio de peso

Rara

Cambios de glucosa en
sangre, hipoalbuminemia,
hipoproteinemia, hemosiderosis

Trastornos psiquiátricos

Poco Frecuente

Ansiedad y cambios de
humor (incluyendo los
síntomas asociados)

Rara

Intento de suicidio, delirio,
trastorno mental, agresión

Trastornos del sistema
nervioso

Frecuente

Dolor de cabeza (incluyendo
migraña), alteraciones
sensitivas

Poco Frecuente

Neuropatías periféricas,
mareo, temblor

Rara

Trastornos de desmielinación
(incluye neuritis de los
nervios craneales),
convulsión, trastornos
extrapiramidal, neuralgia
trigémina, afectación de la
coordinación o equilibrio,
disfonía, facies
enmascaradas, trastornos
del sueño

Trastornos oculares

Poco Frecuente

Trastorno visual (incluyendo
disminución de la visión),
inflamación del ojo y del
párpado, trastorno del
lagrimal

Trastornos del oído y
laberinto

Rara

Pérdida de la audición,
tinnitus, vértigo

Trastornos cardiacos

Poco Frecuente

Trastornos isquémicos de la
arteria coronaria (incluyendo
infarto al miocardio, angina
de pecho), arritmias
(incluyendo fibrilación
auricular), palpitaciones

Rara

Cardiomiopatias (incluyendo
insuficiencia cardiaca)
pericarditis, bloqueo de la
conducción

Trastornos vasculares

Poco Frecuente

Hemorragia o sangrado
(cualquier sitio),
hipercoagulación (incluyendo embolia pulmonar,
tromboflebitis), sincompe
hipotensión, hipertensión,
edema (incluye periférico,
facial), equimosis (incluye
hematoma, petequias)

Rara

Shock, accidente
cerebrovascular, arteriosclerosis, fenómeno
de Reynaud, livedo
reticularis, telangiectasia

Trastornos respiratorios,
torácicos y mediastínicos

Poco Frecuente

Derrame pleural (y síntomas relacionados), asma y
síntomas relacionados,
disnea, congestión del
tracto respiratorio e
inflamación, tos

Rara

Enfermedad pulmonar
intersticial, neumonitis,
úlcera nasal

Trastornos gastrointestinales

Frecuente

Náusea y vómito

Poco Frecuente

Signos y síntomas de la
Enfermedad de Crohn
(incluye estenosis), úlcera
gastrointestinal y
perforación, inflamación del
tracto gastrointestinal
(cualquier sitio), dispepsia,
estomatitis, distensión
abdominal, sequedad
orofaríngea

Rara

Obstrucción intestinal,
ascitis, odinofagía, fisura
anal, hipermotilidad

Trastornos hepatobiliares

Frecuente

Hepatitis (incluye el
incremento de enzimas
hepáticas)

Poco Frecuente

Hepatopatía (incluye
cirrosis), colestasis,
incremento de la bilirrubina
sanguínea

Rara

Colelitiasis

Trastornos de la piel y del
tejido subcutáneo

Frecuente

Exantema

Poco Frecuente

Alopecia, dermatitis y
eccema, trastornos de la
glándula sudorípara, foto-
sensibilidad, trastornos de
las uñas y los lechos
ungueales, acné,
resequedad en la piel

Rara

Dermatosis neutrofílica febril aguda, exfoliación y
descamación de la piel,
trastornos vesiculares,
úlcera cutánea, rosácea,
pitiriasis rosea, estrías,
decoloración cutánea,
trastorno en la textura del
pelo

Trastornos óseos, tejido
conjuntivo y
musculoesqueléticos

Poco Frecuente

Artritis aumento de
creatinfosfoquinasa
sanguínea, trastornos
musculares

Rara

Tendinosis

Trastornos renales y
urinarios

Poco Frecuente

Insuficiencia renal, sangre
en orina, nefrolitiasis,
síntomas en vejiga y uretra,
análisis de orina normal

Rara

Nefropatía (incluyendo
nefritis)

Embarazo, puerperio y
condiciones perinatales

Rara

Aborto espontáneo

Trastornos del aparato
reproductor y de mama

Poco Frecuente

Trastorno hemorrágico
uterino y del ciclo menstrual
(incluyendo amenorrea),
trastornos de la mama

Rara

Azoospermia, balanitis,
secreción vaginal, disfunción sexual

Trastornos generales y
alteraciones en el sitio de
administración

Frecuente

Pirexia, dolor (cualquier
sitio), astenia, prurito
(cualquier sitio), reacción en
el sitio de la inyección

Poco Frecuente

Fistula (cualquier sitio)
escalofríos, enfermedad tipo
gripal, enfermedad similar a
la influenza, alteración en la
percepción de la
temperatura, sudoración
nocturna, bochornos

Prueba de Laboratorio

Poco Frecuente

Aumento de fosfatasa
alcalina sanguínea,
prolongación del tiempo de
coagulación

Rara

Aumento del ácido úrico en
sangre

Lesiones, intoxicación y
complicaciones de
procedimientos

Poco Frecuente

Lesiones de la piel,
problemas de cicatrización

Infecciones: La incidencia de las infecciones en los estudios clínicos controlados en la enfermedad de Crohn, fue de 38.6% en los pacientes tratados con CIMZIA® y del 30.6% en los pacientes tratados con placebo. Las infecciones consistieron principalmente de infecciones de vías respiratorias superiores (18.9% CIMZIA, 12.4% placebo). La incidencia de infecciones serias durante los estudios clínicos controlados, fue del 2.6% en los pacientes tratados con CIMZIA® y del 1.3% en los pacientes tratados con placebo. Las infecciones serias observadas incluyeron infecciones bacterianas y virales, neumonía y pielonefritis.

La incidencia de nuevos casos de infecciones en los estudios clínicos controlados en la artritis reumatoide, fue del 0.91 por paciente-año en todos los pacientes tratados con CIMZIA y del 0.72 por paciente-año en los pacientes tratados con placebo. Las infecciones consistieron principalmente en infecciones de vías respiratorias superiores, infecciones por herpes, infecciones de vías urinarias e infecciones de vías respiratorias inferiores. En los estudios clínicos controlados en artritis reumatoide, se presentaron más casos nuevos de infecciones serias en el grupo de tratamiento con CIMZIA (0.06 por paciente-año, todas las dosis), en comparación al grupo placebo (0.02 por paciente-año). Las infecciones serias incluyeron tuberculosis, neumonía, celulitis y pielonefritis. No existe evidencia de un aumento en el riesgo de infecciones con la exposición continua a lo largo del tiempo.

En los estudios clínicos terminados y en curso, en todas las indicaciones que incluyeron a 5,118 pacientes tratados con CIMZIA, la tasa global de tuberculosis fue de aproximadamente 0.61 por 100 pacientes-año para todas las indicaciones. La mayoría de los casos se presentaron en países con altas tasas endémicas de tuberculosis. Los reportes incluyen casos de tuberculosis pulmonar y diseminada. En estos estudios clínicos también se han reportado casos de infecciones producidas por microorganismos oportunistas. Algunos casos  de tuberculosis e infecciones oportunistas han sido mortales (ver Contraindicaciones y Precauciones Generales).

Neoplasias y trastornos linfoproliferativos: En las etapas controladas de los estudios clínicos de algunos antagonistas del TNF, se observaron más casos de neoplasias entre los pacientes que recibieron antagonistas del TNF en comparación con los pacientes de control. Durante las etapas controladas y de diseño abierto de  CIMZIA en Enfermedad de Crohn y otras enfermedades, las neoplasias (excluyendo el cáncer de piel no melanoma) se observaron en una tasa (intervalo de confianza de 95%) de 0.5 (0.4, 0.7) por 100 pacientes-año entre 4,650 pacientes tratados con CIMZIA contra una tasa de 0.6 (0.1, 1.7) por 100 pacientes-año entre 1,319 pacientes tratados con placebo. El tamaño del grupo control y la duración limitada de las etapas controladas de los estudios, impidieron obtener conclusiones determinantes.

En las etapas controladas de los estudios clínicos de todos los antagonistas del TNF, se han observado más casos de linfoma entre los pacientes que recibieron antagonistas del TNF en comparación con los pacientes del grupo control. En los estudios controlados de CIMZIA en la enfermedad de Crohn y otras indicaciones en investigación, hubo un caso de linfoma entre los 2,657 pacientes tratados con CIMZIA y un caso de linfoma entre 1,319 pacientes tratados con placebo.

En los estudios clínicos de CIMZIA en artritis reumatoide (controlados con placebo y de diseño abierto) se observó un total de tres casos de linfoma entre 2,367 pacientes. Esto es aproximadamente dos veces mayor que lo esperado en la población general. Los pacientes con AR, particularmente aquellos con enfermedad muy activa, se encuentran en un riesgo mayor de desarrollar linfoma.

Las tasas en los estudios clínicos para CIMZIA no pueden ser comparadas con las tasas de los estudios clínicos de otros antagonistas del TNF y pueden no predecir las tasas observadas cuando se utilizó CIMZIA en una población de pacientes más amplia. Los pacientes con enfermedad de Crohn que requieren exposición crónica a las terapias con inmunosupresores, pueden estar en mayor riesgo que la población general para el desarrollo de linfoma, aún en ausencia de la terapia de antagonistas del TNF.

Insuficiencia cardiaca: En los estudios clínicos de artritis reumatoide controlados con placebo y de diseño abierto, se han reportado nuevos casos de insuficiencia cardiaca o empeoramiento de la misma, en los pacientes tratados con CIMZIA. La mayoría de estos casos fueron de leves a moderados y se presentaron durante el primer año de exposición (ver Precauciones Generales).

Inmunogenicidad:

Enfermedad de Crohn: El porcentaje general de pacientes con resultado positivo para anticuerpos fue del 8% en los pacientes con exposición continúa a CIMZIA®, aproximadamente el 6% fueron neutralizantes in vitro. No se observó una correlación aparente del desarrollo de anticuerpos con la eficacia, cuando se administró CIMZIA® de acuerdo al régimen recomendado de dosificación. Los pacientes tratados concomitantemente con inmunosupresores, tuvieron una tasa menor de desarrollo de anticuerpos en comparación a los pacientes que no tomaron inmunosupresores en el registro basal (3% y 11%, respectivamente).

Artritis Reumatoide: El porcentaje general de pacientes con anticuerpos para CIMZIA detectables en al menos una ocasión fue del 7.7% en los estudios clínicos de AR controlados con placebo fase III. Aproximadamente un tercio de los pacientes con resultados positivos para anticuerpos (2.6% de la población total), tuvieron anticuerpos con actividad neutralizante in vitro. Los pacientes tratados concomitantemente con inmunosupresores (MTX), tuvieron una tasa más baja de desarrollo de anticuerpos que los pacientes que no tomaron inmunosupresores en el registro basal. La formación de anticuerpos fue asociada con una disminución de la concentración plasmática del fármaco y en algunos pacientes, con una reducción en la eficacia.

Los datos reflejan el porcentaje de pacientes cuyos resultados de la prueba fueron considerados positivos para anticuerpos contra certolizumab pegol en un ELISA, y son altamente dependientes de la sensibilidad y especificidad de la prueba. La incidencia observada de la positividad de anticuerpos (incluyendo anticuerpos neutralizantes) en un ensayo, es altamente dependiente de varios factores, que incluyen la sensibilidad y especificidad del ensayo, la metodología del ensayo, el manejo de muestras, el tiempo de toma de muestras, medicamentos concomitantes y enfermedades subyacentes. Por estas razones, la comparación de la incidencia de anticuerpos anti-certolizumab pegol con la incidencia de anticuerpos a otros productos, puede ser confusa.

Autoanticuerpos: En los estudios clínicos en la enfermedad de Crohn, el 4% de los pacientes tratados con CIMZIA® y el 2% de los pacientes tratados con placebo que tuvieron valores cuantitativos basales negativos de autoanticuerpos, desarrollaron valores cuantitativos positivos durante los estudios. En los estudios clínicos de antagonistas del TNF, incluyendo a CIMZIA, en pacientes con AR, algunos pacientes desarrollaron autoanticuerpos. En los estudios clínicos de seguimiento con control de placebo y de diseño abierto en la artritis reumatoide y la enfermedad de Crohn, fueron poco comunes los casos reportados de síndrome tipo lupus. Se desconoce el impacto del tratamiento a largo plazo con CIMZIA® en el desarrollo de enfermedades autoinmunes.

Reacciones de Hipersensibilidad: Se han reportado los siguientes síntomas que pudieron ser compatibles con reacciones de hipersensibilidad a CIMZIA después de la administración a pacientes: angioedema, dermatitis alérgica, urticaria, disnea, bochornos, hipotensión, reacciones en el sitio de la inyección, malestar general, pirexia, exantema, enfermedad sérica y síncope (vasovagal).

Dosis y vía de administración: 

Enfermedad de Crohn: La dosis recomendada de CIMZIA para adultos con enfermedad de Crohn es de 400mg inicialmente (administrados en 2 inyecciones subcutáneas de 200mg cada una) y en las semanas 2 y 4; posteriormente, 400 mg cada 4 semanas.

Artritis reumatoide: La dosis recomendada de CIMZIA para pacientes adultos con artritis reumatoide es de 400 mg inicialmente (administrada en 2 inyecciones subcutáneas de 200 mg cada una) y en las semanas 2 y 4; posteriormente, 200 mg cada dos semanas. Para dosis de mantenimiento, se puede considerar 400 mg de CIMZIA cada 4 semanas.

Medicación concomitante: CIMZIA puede ser utilizado como monoterapia o concomitantemente con medicamentos antirreumáticos modificadores de la enfermedad (FARME) no biológicos. En los estudios clínicos de artritis reumatoide, los pacientes bajo terapia con CIMZIA también tomaron metotrexato (MTX) concomitantemente con la dosis recomendada de CIMZIA de 200 mg cada dos semanas.

Población Pediátrica (< 18 años): No se ha establecido la seguridad y efectividad en pacientes pediátricos.

Pacientes de Edad Avanzada: No se requiere ajuste de dosis. Los análisis farmacocinéticas de la población no mostraron efecto por la edad. Se debe tener precaución cuando se traten a los adultos mayores ya que en general existe una mayor incidencia de infecciones en la población de adultos mayores.

Insuficiencia renal y hepática: Cimzia no ha sido estudiado en estas poblaciones de pacientes. No hay suficientes datos para proporcionar una recomendación de dosis, (ver Farmacocinética)

Método de administración: CIMZIA se administra por medio de una inyección subcutánea. El sitio de inyección debe variarse y las inyecciones no deben  aplicarse en áreas  donde la piel sea sensible, esté lastimada, enrojecida o endurecida. Cuando se requiere de una dosis de 400 mg (administrada en dos inyecciones subcutáneas de 200 mg cada una), las inyecciones deben aplicarse en distintas zonas en el muslo o abdomen.

El paciente puede autoinyectarse CIMZIA si el médico lo considera apropiado, con el seguimiento médico según sea necesario y después del entrenamiento adecuado de la técnica de inyección subcutánea. El contenido total (1 mL) de la jeringa prellenada debe administrarse como inyección subcutánea. Cada dosis de 200 mg requiere de 1 inyección subcutánea de 1 mL; cada dosis de 400 mg requiere de 2 inyecciones subcutáneas de 1 mL.

Incompatibilidades: En ausencia de estudios de incompatibilidad, este producto medicinal no debe mezclarse con otros medicamentos.

Instrucciones para el uso y manejo: Los medicamentos parenterales deben ser inspeccionados de manera visual en busca de partículas y decoloración antes de su administración, cuando la solución y el contenedor lo permitan. CIMZIA con partículas obvias o decoloración deberán desecharse.

En el caso de que el paciente o el cuidador estén administrando la inyección de CIMZIA, deben ser instruidos por un profesional de la salud calificado, en la técnica de inyección apropiada y  su habilidad para administrar la inyección subcutánea de CIMZIA debe ser verificada  para asegurar la correcta administración.

Los sitios adecuados para inyectar incluyen el muslo o el abdomen. Cuando una dosis de 400 mg es necesaria (administradas como 2 inyecciones subcutáneas de 200 mg cada una), las inyecciones deben aplicarse en sitios separados en el muslo o el abdomen. No inyecte en el área en donde la piel esté sensible, lastimada, enrojecida o endurecida

CIMZIA debe ser inyectado cuando el líquido se encuentre a temperatura ambiente. Una vez que se retire del refrigerador, necesitará de hasta 30 minutos para que CIMZIA llegue a temperatura ambiente.

Limpie el sitio de inyección con la almohadilla con alcohol adjunta, utilizando un movimiento circular de adentro hacia fuera.

Retire la tapa de la aguja. Cuide no tocar la aguja y no permita que la aguja entre en contacto con alguna otra superficie.

Sostenga la jeringa de tal forma que la aguja apunte hacia arriba. Golpee suavemente la jeringa para empujar cualquier burbuja de aire hacia la punta. Presione el émbolo lentamente para remover cualquier burbuja.

Sostenga la jeringa con la aguja hacia abajo. No toque la aguja con sus dedos o deje que ésta toque cualquier superficie.

Tome suavemente el área limpia de la piel con una mano y sujete firmemente. Con la otra mano, sostenga la jeringa en un ángulo de 45 grados con la piel. Con un movimiento corto y rápido introduzca toda la aguja en la piel.

Empuje el embolo para inyectar la solución. Cuando la jeringa esté vacía, remueva cuidadosamente la aguja de la piel en el mismo ángulo en el cual fue insertado. Libere la piel con la primera mano. Utilizando el pulgar o un pedazo de gasa, aplique presión sobre el sitio de inyección por unos pocos segundos. No frote el sitio de inyección.

Para evitar lesiones por pinchazo, los pacientes y los profesionales de la salud no deben intentar recolocar el capuchón de la aguja en la jeringa o tapar la aguja de otra manera. Asegúrese de desechar de manera adecuada las agujas y jeringas de acuerdo con las regulaciones locales.

Vía de administración: Parenteral (Subcutánea)