VIKROL

Última actualización: 

2020

VIKROL
Antibiótico
MAVI

Indicaciones Terapéuticas: 

Es un antibiótico macrólido de espectro medio, de acción bactericida y efectivo contra un gran número de bacterias aerobias y anaerobias, grampositivas y gramnegativas, por lo que es específico para el tratamiento de infecciones de vías respiratorias altas y bajas. Claritromicina es de utilidad para el tratamiento de:

  • Infecciones de vías respiratorias altas (amigdalitis, faringitis, sinusitis, otitis).
  • Infecciones de vías respiratorias bajas: (bronquitis, neumonía).
  • Infecciones de piel y tejidos blandos (foliculitis, celulitis, erisipela, impétigo).
  • Infecciones diseminadas o localizadas, ocasionadas por Mycobacterium avium o M. intracellulare.
  • Está indicada para la prevención de la diseminación de la infección por MAC en pacientes infectados por VIH, con cuentas de CD4 < por 100/mm3.
  • Para la erradicación de Helicobacter pylori en enfermedad ácido-péptica.

Forma Farmacéutica y Formulación: 

Tabletas.

Fórmula:

Cada tableta contiene:

Claritromicina ......... 500 mg

Excipiente cbp ........ 1 tableta 

Presentaciones: 

Caja con 10, 20 o 30 tabletas de 500 mg.

Contraindicaciones: 

Claritromicina está contraindicada en pacientes con hipersensibilidad conocida a la claritromicina, eritromicina o cualquier otro de los antibióticos macrólidos. La administración concomitante de la claritromicina y cualquiera de los siguientes medicamentos está contraindicada: cisaprida, pimozida, rifabutin y terfenadina.

Reacciones secundarias y adversas: 

Con el uso de claritromicina pueden presentarse eventualmente trastornos de naturaleza leve y transitoria, un bajo número de pacientes requiere descontinuar el tratamiento.

Los efectos colaterales informados más frecuentemente en estudios clínicos han sido relacionados con molestias gastrointestinales como: náuseas, vómito, dispepsia, dolor abdominal y diarrea; otros eventos adversos incluyen cefalea, perversión del gusto y elevación de enzimas hepáticas. Al igual que con otros macrólidos, con el uso de claritromicina se ha informado de la aparición poco frecuente de disfunción hepática, incluyendo elevaciones de enzimas hepáticas y hepatitis hepatocelular, colestática o ambas, con o sin ictericia. Estas disminuciones hepáticas pueden llegar a ser severas, pero son generalmente reversibles. En raras ocasiones se ha informado de insuficiencia hepática con resultado fatal y en general han sido asociadas con serias enfermedades subyacentes o medicación concomitante.

Asimismo, se han informado casos aislados de aumento en los niveles séricos de creatinina, aunque no se ha establecido una asociación.

Las reacciones alérgicas van desde urticaria y erupciones cutáneas leves, hasta anafilaxia y el síndrome de Stevens-Johnson. Se han informado efectos colaterales en el SNC transitorios como: ansiedad, mareos, vértigo, tinnitus, desorientación, despersonalización, insomnio, alucinaciones y confusión, aun cuando no se ha podido establecer la relación causa-efecto.

Rara vez se les ha asociado con arritmias ventriculares incluyendo taquicardia ventricular y Torsades de pointes en pacientes con intervalos QT prolongados.

Ha habido reportes de pérdida de la audición con claritromicina, la cual es usualmente reversible al descontinuar el tratamiento.

Asimismo, se ha informado de la presentación de glositis, estomatitis, moniliasis oral y decoloración de la lengua.

No existe en el mercado antibiótico que no tenga riesgos.

En pacientes con SIDA o inmunocomprometidos que reciben altas dosis, se han informado eventos adversos serios que han sido difíciles de distinguir de los signos subyacentes del VIH o enfermedades intercurrentes. Los eventos adversos más frecuentemente informados en pacientes adultos tratados con dosis diaria de 1,000 a 2,000 mg de claritromicina, fueron: náuseas, vómito, dolor abdominal, mal sabor de boca, diarrea, rash, flatulencia, cefalea, constipación, elevaciones de SGOT y SGPT. Con baja incidencia: disnea, insomnio y boca seca. Los valores de análisis de laboratorio se elevaron. Los leucocitos y la cuenta de plaquetas estaban anormalmente bajos. En pacientes que recibieron 4000 mg al día, un bajo porcentaje también tuvo niveles elevados de nitrógeno ureico.

Rara vez se ha informado hipoglucemia, algunas veces junto con el uso de hipoglucemiantes orales o insulina; asimismo de casos aislados de trombocitopenia.

Se han informado alteraciones del sentido del olfato, por lo general junto con alteraciones del sabor; también decoloración de los dientes, la cual usualmente es reversible por medio de una limpieza profesional.

Dosis y vía de administración: 

Oral.

Claritromicina tabletas 500 mg cada 12 o 24 horas, vía oral, con o sin alimento, dependiendo del diagnóstico.

La duración usual del tratamiento es de 6 a 14 días, dependiendo del patógeno implicado y de la severidad de la patología; incluso se puede duplicar la dosis.

Adultos y niños mayores de 12 años: La dosis promedio recomendada es de 500 mg vía oral cada 12 horas en infecciones más severas.

La dosis inicial recomendada en pacientes con infecciones por MAC es de 500 mg cada 12 horas, si no hay respuesta clínica o bacteriológica, cambiar a 1,000 mg cada 12 horas. Basados en los datos actuales, la duración del tratamiento es variable y debe continuarse hasta que se siga viendo mejoría. Se debe usar claritromicina junto con otros agentes antimicrobianos. La dosis para la profilaxis de MAC en adultos es de 500 mg cada 12 horas.

Dosificación en insuficiencia renal: Se debe considerar el ajuste de dosis o del intervalo de dosificación en todos los sujetos que cursen con insuficiencia renal. En aquellos con una depuración de creatinina < 30 mL/min, no se debe usar la claritromicina. La dosificación debe reducirse a la mitad y su uso no ha de prolongarse más allá de 14 días. No fragmente ni mastique las tabletas de claritromicina.

Régimen de terapia triple para erradicación de H. pylori: Claritromicina 500 mg cada 12 horas, junto con lansoprazol 30 mg cada 12 horas, más amoxicilina 1,000 mg cada 12 horas, durante 10 días.

Información adicional: El Helicobacter pylori está asociado intensamente con la enfermedad ulcero-péptica. De 90% al 100% de los pacientes con úlceras duodenales están infectados con ese patógeno. Se ha demostrado que la erradicación del H. pylori reduce la frecuencia de recurrencia de la úlcera duodenal; por tanto, reduce la necesidad de mantener el tratamiento antisecretor.

La claritromicina ha sido usada en otros regímenes de tratamiento para la erradicación de H. pylori, entre los que se incluyen:

  • Claritromicina más tinidazol y omeprazol o lansoprazol.
  • Claritromicina más metronidazol y omeprazol o lansoprazol.
  • Claritromicina más tetraciclina, subsalicilato de bismuto y ranitidina.
  • Claritromicina más amoxicilina y lansoprazol.