Actualización y perspectiva futura de la Medicina Conductual en el tratamiento del dolor crónico

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Han pasado más de 45 años desde que el término “Medicina del Comportamiento” apareció por primera vez en la literatura.

Evolución del concepto dolor

El nacimiento de los enfoques de la Medicina Conductual en el manejo del dolor coincidió aproximadamente con el momento en que comenzó a surgir el concepto de dolor como un fenómeno multifactorial y biopsicosocial.

Antes de esto, el dolor a menudo se consideraba puramente somático o, alternativamente, psicógeno si el dolor no se explicaba por la presencia y extensión del daño tisular.

La reducción del estrés basada en la atención plena (MBSR, por sus siglas en inglés) se desarrolló en la década de 1970 como un enfoque para minimizar las respuestas al estrés mediante el ejercicio meditativo. Como parte del ejercicio de atención plena, se alienta a los pacientes a experimentar sensaciones corporales sin atribuirles valores emocionales.

La práctica enfatiza la importancia de aceptar las sensaciones corporales, incluido el dolor, como algo que ocurre naturalmente en un cuerpo.

Se supone que esta práctica de aceptación atenúa los pensamientos negativos y las emociones asociadas con la experiencia del dolor, reduciendo así sus impactos adversos.

Este enfoque ha ganado mucha atención por parte de la prensa popular y se convirtió en uno de los métodos no farmacológicos más populares para abordar las condiciones relacionadas con el estrés.

Enfoque MBSR

La evaluación de los resultados de MBSR ha sido difícil debido en parte a la variabilidad en los enfoques terapéuticos.

Hay una colección de técnicas bajo el término MBSR. Si bien todos tienen como objetivo lograr la atención plena, un amplio espectro de técnicas dificulta la integración de los resultados.

De manera similar, MBSR está arraigado en las tradiciones budistas; sin embargo, su fondo filosófico puede variar dependiendo de qué secta de budismo sigue un protocolo de tratamiento. Además, el rigor metodológico de los ensayos clínicos que prueban MBSR es relativamente débil.

El dolor crónico presenta uno de los problemas de salud pública más graves de nuestra sociedad. La investigación ha demostrado constantemente que el dolor crónico no es un trastorno puramente sensorial, biomédico, sino un fenómeno biopsicosocial en el que interactúan diversos factores biológicos, físicos y psicosociales.

Conclusiones

Desde su inicio hace más de cuatro décadas, la Medicina Conductual ha contribuido al campo del manejo del dolor. Asimismo, ha habido una proliferación de investigaciones que demuestran la importancia de los factores psicológicos que contribuyen al desarrollo y mantenimiento del dolor crónico.

Los enfoques terapéuticos han seguido evolucionando sobre la base de nuevos hallazgos. La investigación sobre las terapias más recientes es preliminar en este momento, pero los resultados son prometedores.

Los profesionales de la Medicina Conductual pueden ampliar sus servicios para ayudar a estos médicos a aprender herramientas de esta disciplina que pueden utilizar para ayudar a sus pacientes.

Un modelo de consulta de telemedicina o telesalud está ganando atención y puede proporcionar un método para difundir el aprendizaje clínico de los enfoques de la Medicina Conductual a los clínicos no psicólogos para el tratamiento del dolor crónico.

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